A pocos días de la entrada en vigencia de la regulación del Convenio SOLAS sobre la verificación del peso para contenedores (VGM), los puertos marítimos han iniciado los procedimientos para garantizar que no se vea afectada la dinámica portuaria.
Según la norma, ningún contenedor debe ser embarcado si el cargador no provee al capitán y a la terminal la información sobre el peso verificado de la carga. Si no se realiza este procedimiento previo, el contenedor se quedará en el puerto hasta que se cumpla la norma.
A pesar de la lluvia de críticas de parte de diversos actores de la cadena logística, el plazo sigue vigente y no habrá prórrogas, por lo que algunos puertos ya están acondicionando sus instalaciones y estableciendo parámetros antes del 1° de julio, día de la entrada en vigencia de la norma.
En Chile, las autoridades marítimas y portuarias intentan llegar a un acuerdo de cómo se aplicará la norma. En un artículo para Portalportuario.cl, mencionan que las autoridades se están concentrando en quién certificará las básculas para el pesaje. Por su parte, Ricardo Tejada, Gerente General de Asociación Nacional de Armadores (ANA) indicó que la puesta en práctica de la norma producirá cuellos de botella y retrasos en la cadena logística, al menos por los primeros días: “En principio, aunque esperamos que no, se podrían generar demoras, porque todavía no está aclarado cómo se va a hacer y porque no hay romanas suficientes en Chile para satisfacer esa demanda” aseguró.
Indicó que aunque la norma no establece el plazo con el que se debe entregar el VGM al capitán y a la terminal, lo ideal sería al menos dos días antes, de modo que el capitán del buque pueda preparar el plano de estiba con antelación.
En Chile, el Puerto de Chacabuco ha sido el primero en instalar básculas, con una inversión de 60 millones de pesos.
Enrique Runin, gerente general Puerto Chacabuco revisando la báscula instalada en el terminal. (http://portalportuario.cl)
Al otro lado del Atlántico, el puerto de Barcelona ha sido el primero en desarrollar en este país un procedimiento electrónico para declarar el peso verificado de los contenedores o VGM. Incluye el intercambio de documentos necesarios desde el cargador al consignatario, y de éste último hasta la terminal.
En Reino Unido, el puerto más grande de este país, el puerto de Felixstowe ha dicho recientemente que permitirá la entrada de contenedores que lleguen al puerto sin el peso verificado; pero si el cargador no provee la información al menos 24 horas antes de la llegada del buque, se cobrará un monto de €77 por el transporte del contenedor desde y hasta cualquiera de las dos estaciones de pesaje que se encuentran a los extremos de la terminal.
La compañía DP World, indicó que los puertos de Londres y South Hampton también implantarán equipos para verificar el pesaje de contenedores, aunque no se dieron detalles de cómo funcionará el sistema.
En Estados Unidos han optado por la opción contraria. El Puerto de Houston señaló que no aceptará contenedores que no hayan certificado el peso de los contenedores electrónicamente antes de su llegada.
Hasta ahora, el Terminal Seagirt en el Puerto de Baltimore ha sido el único de Estados Unidos en aceptar contenedores sin el VGM, ofreciendo el pesaje en puerto con sus propias básculas, o dejar al cargador para que una tercera parte realice el pesaje.
A pesar de que el plazo está a punto de finalizar, aún existe cierta incertidumbre en torno a la aplicación de la norma. Algunos exigen una prórroga para la adaptación a la norma, mientras que otros señalan que si se establece una manera efectiva de comunicar el VGM entre el Cargado- Consignatario- Terminal se hará mucho más fácil el cumplimiento del convenio SOLAS.
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